LA VERDAD/LAS PROVINCIAS – 30/10/2016

La Plataforma Renfe pide pintarlo de azul para reducir su impacto visual

El Puente Rojo puede tener sus días contados si prospera la propuesta que piensa trasladar la Plataforma Renfe al Ayuntamiento para que cambien el color que da nombre a la infraestructura y la pinten de un azul «alicantino» (la bandera oficial de la ciudad es azul y blanca), afirmaba a este periódico el portavoz vecinal José María Hernández Mata. Además, creen que serviría para disimularlo un poco en el horizonte.

Bien es conocida la animadversión que ha demostrado este movimiento ciudadano al susodicho puente (de hecho, su presión consiguió que se eliminara en el primer proyecto de urbanización aprobado provisionalmente por el Pleno) frente a la opinión contraria del concejal de Urbanismo, Miguel Ángel Pavón, que quiere mantenerlo.

Por el momento, una solución intermedia es la que proponen los vecinos: pintar el famoso puente de azul aprovechando los trabajos de reparación y mantenimiento que ha aprobado el Ayuntamiento de Alicante después de 16 años sin tocar la infraestructura. Los vecinos solicitan repintar la estructura entera y modificar el rojo que le da el nombre por un azul «alicantino». De esta manera, entiende Hernández Mata, «se reduciría el impacto visual en la lejanía».

La Concejalía de Urbanismo invertirá 335.000 euros en diversos trabajos de mantenimiento y reparaciones en el Puente Rojo, que no se realizaban desde 1999. Los trabajos comprenden un intenso lavado de cara de la infraestructura, con el mantenimiento de la estructura metálica fundamentalmente, aunque también se han renovado ya las juntas de dilatación y se colocarán pantallas laterales para eliminar la contaminación acústica, lo que, a juicio de los vecinos, «provocará mayor impacto visual» todavía que quieren disminuir.

No son pocas las bromas que se hacen sobre la intención del edil de Urbanismo de mantener el puente precisamente porque es rojo, color vinculado a los partidos de izquierdas como el del concejal.